SALVACIÓN
Irrumpes
soledad de soledades.
Hay días en que no puedo pensar en el retoño.
en cada paso se escriben mis memorias
cuando empiezan a habitarme las palabras.
En el goce del sol,
acecho en torno
como un tigre con insaciable avidez,
la presa fugitiva de aleluyas.
Muy cierto Cristina. Nos habitan las palabras y lo que vivimos se plasma en ellas. Tu poema es hermoso y profundo.
ResponderEliminarSusana Cattaneo.
Acechar como un tigre, en el goce del sol, lo fugaz; ser habitada por palabras ante la irrupción de la soledad, ante el fluir permanente de la vida... Bello tu poema, con esa verdad existencial que plasmas en él. Cecilia Glanzmann
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