SUSANA CATTANEO
DIALOGÓ CON CRISTINA PIZARRO.
En el marco del
Simposio Internacional de Literatura organizado por el ILCH- Instituto
Literario y Cultural Hispánico de California, que tuvo lugar en el mes de
agosto del 2015, se llevó a cabo este diálogo entre las dos poetas argentinas,
a propósito del lanzamiento del libro Diálogo/Dialogo con mi obra poética.
Exploración retrospectiva, publicado por Enigma Editores y que integra la
colección Estudios Hispánicos del ILCH.
Susana Cattaneo
expresó:
"Das con tu
obra un legado que se traduce en dar cuenta de la belleza del existir, resaltar
el lugar en el mundo de las pequeñas y grandes cosas de la vida que, sin la
poesía, se perderían para siempre. Siento que tu obra es riquísima, es un canal
abierto y que cuando comenzamos a transitarla, no queremos dejar de hacerlo.
Vamos recibiendo altos impactos, como por ejemplo, la sensación de libertad que
nos da el contacto con la naturaleza. Tu poesía lleva todas las artes, la
palabra, la música, la pintura, el canto a la tierra. Hablar de este libro
es hablar de toda tu obra. En "No sabré el final del tiempo" encuentro
la idea de eternidad en lo manifiesto y en los silencios de los poemas. Es algo
fascinante. Esta pregunta que sigue tal vez sea muy difícil de responder, pero
¿qué es para vos la eternidad? Está avalada por toda la belleza que vos
describís en este libro que ahora presentas."
A continuación,
las preguntas y las respuestas:
ETERNIDAD
Con tu libro he
emprendido un viaje que me lleva a distintos puertos: a tu obra total, que es un extenso libro
dividido por diferentes títulos. Encuentro un hilo conductor en todos ellos que
me revela tu esencia. Desde tus primeros poemas, en los cuales hay una añoranza
de la infancia, ya se revela la fuerza irrefrenable de transitar el sendero de
la espiritualidad. Hay giros que terminan siempre en el renacimiento, en la
esperanza, en la búsqueda de la vida eterna. Siempre se refuerza la idea de que
la muerte es un cambio de estado y no el fin de la vida. Se observa, claramente,
en tu personaje Gertrudis donde renace la vida porque la materia se transmuta.
Lo mismo en Rosalind. Es tan movilizador en toda tu obra que me gustaría
que nos amplíes un poco este tema.
¿Cuáles son tus sentimientos frente a este misterio que tiene que ver con la
eternidad.
C.P. Me he
detenido a revisar este tema de la eternidad en todos mis libros y lo he
encontrado en los siguientes poemas, los iré citando por título:
Poemas
de agua y fuego: Paisaje –Reino, 33
La
voz viene de lejos: Cercanía, 34
Lirios
prohibidos: Yo, Sócrates, 33; Piedad, 59; Hipnosis, 37-38; Tristán e Isolda, 57.
Jacarandaes
en celo: Vía láctea, 30; Travesía,40-41; Éxtasis,42; Presente eterno,57-
Confesiones
de Gertrudis Glauben: Gertrudis Glauben y el pozo de agua, 50-51;Dasein 66-67;
Carta a Gertrudis Glauben, 83-84; Recuerdos-deseos de Gertrudis Glauben,91-95
Diario
de Rosalind Schieferstein: Yo soy,21;El fin,50-51
No
sabré el final del tiempo: De temporum fine comoedia, 27; Tu figura blanca, 45;
Nubes, 76; Verdad interior,78; Gritos y alabanzas,83.
Mis
sentimientos con respecto de la eternidad estarían relacionados con la
perplejidad: sería algo así como “el bosque perplejo” que aparece en
jacarandaes, señalado por Sebastián Jorgi en el prólogo (13) referido al poema
“El mago guarece mi partida.”(18)
La
infinitud, y el querer ser inmortal, se repiten bastante. Es esa idea de
no-tiempo, de atemporalidad como sucede en los sueños y en los dioses. La
narrativa se funda en el pasado, la poesía más bien busca eternizar el presente,
muy ligado a nuestro Ser.
En
varios textos, hago alusión al tiempo cíclico propio de la filosofía oriental,
en el Budismo, en el zoroastrismo, religión de los persas, entre los egipcios
como se observa en el Libro de los muertos, a través del Dios Osiris, el eterno
retorno que desarrolla Friederich Nietzsche en Así habló Zaratustra.
Creo
que el influjo más sobresaliente lo recibí de Borges, lectura a la que me
acerqué en la adolescencia, que aunque sin estudiarlo hasta cursar el
profesorado; y confieso que apenas leí una ínfima parte de su obra.
Borges
expresa en el prólogo a Historia de la eternidad (1936)
“¿Cómo
pude no sentir que la eternidad, anhelada con amor por tantos poetas, es un
artificio espléndido que nos libra, siquiera de manera fugaz, de la intolerable
opresión de lo sucesivo?”
Recordemos
que Borges no era creyente y yo sí, lo soy.
En
la Divina Comedia ,
también aparece el tema de la eternidad. Así como también en poetas más
cercanos a nosotros. (Rainer María Rilke, Octavio Paz). No recuerdo bien entre
los ingleses y españoles que tanto me gustaron. Supongo que me atrajo el tema en
William Blake.
Eternity
“
He who binds to himself a joy
Does
the winged life destroy;
But
he who kisses the joy as it flies
Lives
in eternity sunrise”
“El
que ata a sí una alegría
Destruye
la vida alada
Pero
el que besa la alegría en su vuelo
Vive
en la aurora de la eternidad”.
SOBRE EL MISTERIO
Poemas de agua y
fuego
Interiores
La voz viene de
lejos
Máscara, 35
Lirios prohibidos
Conjuro, 45
Jacarandaes en
celo
El puente del
diablo se ha derrumbado
Confesiones de
Gertrudis Glauben
Gertrudis entre
Psiquis y Eros
Diario de Rosalind
Schieferstein
Geometría, 59
Se hunde el mal,
83
Convite, 102
No sabré el final
del tiempo
Qué me dice tu
rostro
De Temporum fine
comoedia
Sombra
Trampa mortal
El corazón del
hombre es su propio Dios
Espectro
JUNG-
MAESTROS QUE INFLUYERON
En
todos tus libros abordas los temas más atrayentes para todo ser humano
pensante: Dios, la paz interior, la impermanencia, el azar, el misterio. No soslayas el dolor. Abordas los
mitos, los símbolos y también nombras la sombra. Esto lo he asociado con Carl
Jung cuando habla de la sombra y dice que es todo lo oscuro del inconsciente,
lo que desconocemos y negamos en nosotros. Asocié esto con los arquetipos y el estudio de los sueños,
porque vos decías que muchas veces escribís debido a un sueño que tuviste. No
he escuchado eso muchas veces. ¿Cómo
sería el pasaje de lo que soñás a tu escritura? Generalmente, la gente dice que
escribe cuando le viene la inspiración pero nunca de los sueños. ¿Has tenido
alguna influencia jungiana? Te lo pregunto porque al estudiar a Jung uno
comienza a soñar diferente. Y aprovecho para preguntarte, también, si hay algún
Maestro que haya influido en tu escritura, en vos como persona.
C.P.
Sobre la sombra:
No
recuerdo exactamente cómo empecé a interiorizarme en Jung a través de su libro
El hombre y sus símbolos, donde se hace referencia al tema de la sombra. Muchos
de los temas de mis poemas, también los he desarrollado desde lo teórico y lo
he aplicado al estudio de la enseñanza de la literatura (el amor, la mirada, el
espejo, el sueño, la máscara, los miedos, el doble, la sombra).
Pienso
que surge de mi interés por el análisis de los cuentos maravillosos que me
abrieron un mundo de inagotables riquezas.
Por
supuesto que mi inclinación por el Psicoanálisis ha dejado valiosas improntas,
no solo como persona que se analiza, sino por las lecturas de teorías
literarias como la de Julia Kristeva. De ninguna manera, he sido una estudiosa
de Carl Jung, solo he tomado algunos conceptos para enriquecer mi formación
como docente.
El
pasaje del sueño a la escritura se plasma en una especie de ensueño dirigido
con la técnica psicodramática del pensamiento en escenas. Hay un pasaje desde
lo corporal a la palabra. Sobre este tema también he hecho abordajes teóricos y
lo he trabajado en talleres de creatividad.
Nombrar
maestros es reconocer y transitar por toda mi historia.
Mis
maestros de taller literario fueron: Atilio Castelpoggi, (1980-1981) Liliana
Lukin,(1986), Hebe Solves (1988), Gloria Pampillo(1988) en narrativa, Jorge
García Sabal,(1994) Roberto Ferro, más en lo teórico, (1992-95)Alicia
Steimberg, en narrativa,(1994), Ester de Izaguirre.(1993-1997).
Autores
que considero magistrales desde mi infancia:
Lin
Yutang me sorprendió a los doce años.
Leopoldo
Lugones y Ruben Darío en sexto grado.
El
túnel de Ernesto Sábato a los 14 años.
Las
Rubayat de Omar Kayyam a los 15.
Cortázar
a los 15, con Final de juego
Jorge
Luis Borges, ya en la escuela secundaria.
Leía
poemas en inglés entre los 9 y 19 años. Los Daffodils de William Wordsworth,
que transcribí en Jacarandaes, 16.
Me
gustaban las zambas del folklore argentino. Escuchaba los discos, repetidamente
y copiaba las letras.
Toda
la música popular, la música clásica y española de cuando estudiaba danzas
influyó mucho en mi oído.
Cuando
estudié en el profesorado me apasioné con los españoles del Siglo de Oro, la
generación del 98, del 27, los niños de la guerra.
Cuando
descubrí a Olga Orozco, me sentí subyugada. Me encantó el Neruda de Residencia
en la tierra.
Muchos
autores figuran en epígrafes.
Por
otra parte, autores de ensayos filosóficos: Heidegger, Gadamer.
Estudiosos
de las religiones y de los mitos: Mircea Eliade, Joseph Campbell, además leer,
a Krishnamurti me sacudió bastante.
También
el contacto de los poetas coetáneos y amigos que tuve oportunidad de analizar.
Encontré
esto en un cuaderno del 2004.
Revelaciones
“Los
cuentos de hadas me llevaron por senderos insospechados.
Cuando
me interesé por estudiarlos y analizarlos, descubrí diversas interpretaciones
que me iniciaron en la búsqueda de los significados de los símbolos.
Así
pude penetrar en algunas culturas antiguas y adentrarme en un mundo
maravilloso.
En
ese intento de la búsqueda del ser, mi propio ser y el de los otros para
alcanzar la comunicación entre el Tú y el Yo, bebí de las fuentes del Libro de
las Mutaciones, de la Poética
del espacio, El aire y los sueños y el fuego de Gaston Bachelard, de los
símbolos de Jung, del mito del eterno retorno de Mircea Eliade.
El
contacto con escritores de otros países me brindó la oportunidad de darme
cuenta del Volver al Origen y ahí está el gran enigma que se convierte en voraz
deseo de mi creación literaria.
¿Cuál
es el origen? ¿Dónde está?
¿Acaso
en España, en las cuevas de los gitanos, entre las montañas del Tirol desde
donde se oigo sonidos que me aclaman cuando la tierra de mi abuelo materno
todavía pertenecía al Imperio Austro-Húngaro? ¿Será en la América Precolombina ,
en medio del vuelo del cóndor cerca de las laderas de un valle donde las
tejedoras traman una escena de amor con vibrantes colores, entre el rey y la
sacerdotisa?
Soy
consciente de mi zozobra. Temo por la incertidumbre y confusión que vive la Humanidad.
Así
como creo en Dios, también creo en el poder mágico de la Palabra. Concibo
a la poesía con su función purificadora.
Acaso
el Poeta sea un demiurgo que se propone la creación de un universo soñado.
PROYECTOS
Das con tu obra un
legado que se traduce en dar cuenta de la belleza del existir, resaltar en
el mundo el lugar de las pequeñas y
grandes cosas de la vida que sin la poesía se perderían para siempre. Es seguro
que estás satisfecha de la labor que hiciste, porque es maravillosa, pero, se
me ocurre preguntarte si tenés algún proyecto en vista para profundizar aún
más, dado que estos son temas que no se
acaban nunca. ¿Es así o sentís que se puede dar por concluido este trabajo?
C.P. Pienso que el
poema “Incompletud “da respuesta a esto, surgido de una cita de Mijail Bajtin:
“Un hombre
permanece vivo por el hecho de no estar concluido y de no haber dicho todavía
la última palabra”. (Jacarandaes, 75).
Considero que las
líneas están trazadas. Podría seguir indagando en mi propia obra, como se
expresa en el ítem “otros temas” pero me
parece que es suficiente de modo tal de poder dedicarme a nuevos proyectos.
RESPUESTAS
Vos decís que
escribís para indagar en la condición humana. Veo que indagás en la vida en
general, en todos los reinos, mineral, vegetal, animal. Es obvia la búsqueda de
respuestas. Esas respuestas Olga Orozco decía que no podían encontrarse de este
costado del mundo. ¿Qué dirías frente a esto? ¿Sentís que has podido acercarte,
aunque más no sea un poco, a lo que está
contenido en el misterio que abarca la
vida y la muerte?
C.P.
No me lo he propuesto como tarea el escribir para indagar, es mi actitud
permanente que no es ajena a la escritura. También exploro por medio de la
lectura, del análisis de textos, de la obra de arte en general.
Pienso
que estoy en la etapa del darme cuenta de reconocer mi propio deseo por
acercarme al conocimiento. Una especie de gnosis. Ahora se me ocurre que no es
casual que haya empezado a participar de un taller Bíblico este año, en el
Monasterio de las Hermanas misioneras de la Orden de San Benito. En San Pablo se manifiesta
el amor a Dios y al conocimiento. Señalo que el personaje de Gertrudis tiene
una conexión con la
Santa Gertrudis , patrona de las escritoras, que estaba en un
monasterio benedictino, como se expresa en el poema Tierra yerma (88-90)
FORMA Y TIEMPO DE
TRABAJO
Dices que
estuviste unos años para hacer este estudio de tu obra. ¿Fue un trabajo
ininterrumpido? ¿Te resultó fácil o dificultoso? ¿Cuál fue tu modalidad de
trabajo?
C.P. El germen
embrionario ha sido un cuaderno de bitácora en el año 2004, donde me proponía
reflexionar sobre la escritura, que al mismo tiempo era una tarea para mis
alumnas del profesorado. Yo les decía: si van a enseñar a leer y escribir a los
niños, es importante que tengan la experiencia y que registren el proceso que
llevan a cabo.
Pasado el tiempo,
después del sexto libro de poemas, me surgió la necesidad de volcar en el blog
esta serie de temas, creo que se inició hace tres años la primera entrada.
Hubo una
convocatoria del ILCH para enviar un ensayo sobre mujeres. Sentí la necesidad
de armar un artículo sobre este Diálogo y al resultar muy extenso, se fue
convirtiendo en libro.
La propuesta de
Diálogo/ Dialogo con mi obra fue un taller de exploración sobre la propia obra
que había lanzado en el 2007. Participó una escritora fallecida y otra desertó.
¿QUÉ SENTÍS FRENTE A LA OBRA TERMINADA?
C.P.
Siento mucha emoción, sorpresa, asombro, felicidad, satisfacción. TOMA DE
CONCIENCIA.
Fue un trabajo en secreto. Nadie de mi familia
lo sabía.
Coincide
en que estoy haciendo unos talleres de psicología espiritual. Como estaba ya,
previamente, escrito, el trabajo fue de estructura del libro, que resolví en
este último mes con la intención de darlo a conocer en el simposio.
Vos
pensarás: ¿qué audacia? o ¿qué locura?
Buenos
Aires, agosto de 2015.
Mis felicitaciones , Cristina, por tu inmenso aporte a la cultura.
ResponderEliminarEstuve allí, las escuché, fue una hermosa experiencia la de esta Entrevista Cristina y Susana. Felicitaciones con honda alegría. Cecilia Glanzmann
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