HIPNOSIS
Me
sumerjo en el imperio de la noche
desde
aquel palacio rodeado de un séquito de dioses
que
hieren con sarcasmo
mientras
recogemos lirios prohibidos.
Mi
cuerpo
a
veces deshabitado del presente
comienza
a ensoñar
recorriendo
los laberintos del sexo.
Después
de descender a los Infiernos
y al
ver a las Erinias
nos
entregamos al goce
y
recuperando lo esencial
convertimos
la vida en una fiesta.
Ningún
gemido podrá turbar la tierra aletargada.
Mis
senos guardan el misterio del origen
porque
el vuelo fue más allá de los sentidos
cuando
las semillas de sangre esparcieron
corales
en la arena.
En el
despertar de tu voz
el
sueño viaja
contemplando
la ventura.
Mi
fuego vital se une al dios
del
éxtasis.
Me
pondré un vestido de espigas
para
renacer a la noche del sepulcro.
El
rocío bendecirá la tierra
transmutada
en esperanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por dejar su comentario. A la brevedad lo podrás leer. Cristina.